viernes, 8 de octubre de 2010

♣ CARTOGRAFÍA DE LAS ESTRUCTURAS DEL PODER EN MARIO VARGAS LLOSA

Carlos Villacorta Valles

La Academia Sueca dijo que el escritor peruano Mario Vargas Llosa ganó el Premio Nobel de Literatura 2010 por su "cartografía de las estructuras del poder y aceradas imágenes de la resistencia, la rebelión y la derrota del individuo". Una distinción entonces de mayor peso político.

La cartografía de las estructuras del poder se refiere a que Vargas Llosa ubica bien los mecanismos de control social, la teoría del poder o lo que él gusta decir “estoy contra todo tipo de dictaduras”. Sus novelas como “La fiesta del Chivo” por ejemplo hablan de ello.

Sin ser aguafiestas, la tal cartografía vargallosiana se circunscribe al poder dictatorial o “totalitario” que recorre los pasillo del Estado, no encuentro en ninguna de sus obras el poder y la dictadura que ejerce el imperio del capital sobre el ser humano, no encuentro en ninguna de sus obras que recuse el imperio, la dictadura y poder económico y del mercado, del liberalismo y pensamiento único, porque él forma parte de ese poder. Su cartografía del poder está sesgada por su clara y militante actitud dictatorial liberal y la sombra lejana de su colectivismo primigenio.
Hablan de rebelión y derrota del individuo, cuando el liberalismo es sobre todo individualista, individuo “puro” que impulsa una verdad mentirosa “que la felicidad colectiva es un imposible”.

A diferencia de Michel Foucault que ve las estructuras del poder en la multiplicidad de opresiones desde los presos políticos, pasando por las minorías sexuales y dementes y, ante todo los marginados económicamente y políticamente. Para Vargas Llosa además sólo son democráticos los liberales surgidos de las urnas electorales. Por ello se resiste y se rebela contra Fidel castro, Hugo Chávez y Evo Morales, por nombrar a los principales antiliberales “dictadores” según Vargas Llosa.

No hay que olvidar que, por las mismas razones de pensamiento, credo o ideología ataca injustamente a José María Arguedas con su “Utopía arcaica”.

La academia Sueca, seguramente nos está enseñando que todo escritor transmite en el fondo un mensaje ideológico y político, nos aproxima o aleja del poder, nos aproxima o aleja de la realidad; por ello es erróneo lo que dicen algunos que Vargas Llosa es mejor como escritor o literato que como político y qué bueno que fracasó como político porque regresó a la literatura para ganar el Nobel. Qué patético pensar que lo político es sólo elecciones y Estado, escondiendo la multiplicidad de facetas que tiene. Es política por ejemplo cuando Vargas Llosa defendió y justificó la invasión militar a Irak.

 Es política por ejemplo cuando Vargas Llosa renunció la Presidencia del Museo de la memoria en acto de protesta contra el decreto ley que dejaba en libertad a violadores de los derechos humanos. Cuando dice que Alan García Ahora es demócrata, pero en su primer período no lo fue porque quiso estatizar la Banca. Vargas Llosa entonces es literato y político y, ante todo, político. Independientemente de toda conjetura o disquisición, Vargas Llosa es un gran escritor.

1 comentario:

  1. La Academia Sueca dijo que el escritor peruano Mario Vargas Llosa ganó el Premio Nobel de Literatura 2010 por su "cartografía de las estructuras del poder y aceradas imágenes de la resistencia, la rebelión y la derrota del individuo". Una distinción entonces de mayor peso político.

    ResponderEliminar